lunes, 26 de diciembre de 2011

Turrones los justos

Con el parón navideño en la Liga Adelante, los clubes tienen que cuidar la alimentación y el tono físico de sus jugadores, para que a la vuelta, no haya sorpresas en la báscula. En el Nàstic de Tarragona, todos los futbolistas se marcharon de vacaciones con dos documentos bajo el brazo. Uno, detallando aquellos ejercicios a nivel de preparación física y otro a nivel de alimentación. El doctor Carles Hernández ha señalado aquellos manjares peligrosos y que no ayudan a mantener el peso ideal del futbolista conseguido durante la competición. Naturalmente, son aquellos fritos, guisos y las guarniciones. Ni que decir de todos los dulces típicos de navidad, además de las bebidas alcohólicas. Todos ellos son considerados como hipercalóricos. Eso no quiere decir que la plantilla del Nàstic no los pueda consumir, si no que hay que ir con mucho ojo para no pasarse.

Además, el preparador físico Romà Cunillera explica que “les he marcado una rutina de cuatro días, en jornadas alternas, dado que tienen ocho días de vacaciones. Sobretodo tienen que trabajar a nivel de resistencia cardio vascular”. ¿Y cómo se consigue? “Simplemente tienen que hacer trabajo intermitente de potencia, con series muy cortas de carrera. Estos ejercicios están lejanos a los que realizan con pelota, pero les sirve para mantener el tono” dice el propio Cunillera. También hay que trabajar la potencia con unas tablas de entrenamiento más individualizadas, acorde a las características de cada jugador.

El Nàstic volverá a los entrenamientos el próximo día 27. Será momento de subirse a la báscula y comprobar si las fiestas navideñas han pasado factura. Por si acaso, las dos primeras jornadas de entrenamiento estarán encaradas a trabajo específico. “Haremos trabajo en gimnasio para la preparación muscular y también en la playa” concluye el preparador físico Romà Cunillera.

Artículo publicado el día 25 de diciembre de 2011 en el diario Marca